Marco se dedico a sacar todos los ruidos extraños que pudo a su guitarra y a tirarse por el escenario, Coldo hacía una critica destructiva de cada canción una vez terminaba y yo estaba enfurruñado en un rincón indignado. Carmén seguía el ritmo de las canciones incluso cuando hacía ya veinte segundos que habían terminado y El pajaro bailaba entusiasmado con su bajo prestado.
Sin embargo a pesar de eso creo que hubo momentos intensos y hermosos en ese caos terrible. Durante "Devuelveme mi secreto" la gente dejo de hablar entre ellos para dirigir las miradas al escenario donde ese loco que hacía unos segundos se dedicaba a sacudir su guitarra contra el amplificador de pronto habia empezado a cantar una extraña y meláncolica melodía y mascullaba en la letra que "la noche borraba el mundo", y al final del concierto la gente incluso llego a bailar mientras Carlos y Marco berreaban por sus micros "Crisis en mi habitación, crísis en la religión, crisis en el Rock and Roll, crísis, crísis".
Pero yo me fuí muy desanimado a mi casa, ninguna de mis canciones se habían percibido tal y como yo quería. Pero Claro era solo el primer concierto y recuerdo que los primeros conciertos de"el diablo adolescente" fueron mucho más terribles Así que seguimos todas las semanas en el local ensayando para conseguir hacer algo genial en nuestro proximo concierto, algo que se pueda vislumbrar entre todo el ruido y el caos y el absurdo. Entre el desorden del que formamos parte. Algo que nos haga sentir especiales dentro de nuestras vidas mediocres y intentando sacar virtudes de nuestros peores defectos.
ns hacen lo que pueden... 
ns hacen lo que pueden... 
